Siempre me había sentido muy afortunada de tener muchos amigos... ahora me siento afortunada de tener amigos verdaderos. Hay un dicho muy común que dice que los amigos verdaderos los has de contar cuando te encuentras enfermo o cuando tienes problemas. Desafortunadamente yo me dí cuenta de quienes eran mis amigos verdaderos en un momento difícil de mi vida, uno muy oscuro, lamentable para mí, fue allí cuando me di cuenta que los amigos que en verdad te quieren, han de estar pendiente de ti, de lo que sientes, de lo que piensas, de lo que necesitas. Fue en ese momento que me dí cuenta de la importancia de un abrazo sincero, de las palabras de aliento, de un mensaje, de una llamada, de que no se necesita estar presente para apoyar a alguien, que las distancias las ponen las personas, no los kilómetros, que, quien te quiere bien, hará lo posible por mostrar su cariño hacía ti, me dí cuenta de lo valiosas que son muchas personas para mí, y de lo valiosa que soy yo ...